Quercus pyrenaica

Quercus pyrenaica, comúnmente conocido como rebollo, es un árbol que pertenece a la familia Fagaceae y al género Quercus.
Se trata de una especie caducifolia con hojas simples muy lobuladas y con peciolo bastante corto. Por el haz, tiene un color verde vivo y por el envés tiene un color verde más grisáceo y en ocasiones tiene "pelusilla" blanca.

En buenas condiciones supera los 30 metros. Su desarrollo es lento, aguanta bastante bien la sequía, soporta las heladas y es poco longevo.

Cuando el suelo es pobre forma masas arbustivas. En cuanto al aprovechamiento de su madera se utiliza para leña.
La hibridación con la encina, el roble y los alcornoques es muy fácil.
Se trata de un árbol dioico y unisexual que contiene las flores masculinas y femeninas en el mismo pie. Su fruto y a la vez semillas que producen son bellotas gruesas, con pedúnculo corto de 3-4 mm. Alcanzan la madurez en octubre o noviembre.













Hablando de su distribución podemos observar

que sobre todo se extiende por la Cordillera Cantábrica.

En Cantabria son comunes los rebollares en la vertiente norte de la Cordillera Cantábrica, entre los 700 y los 1400 metros de altitud, sobre todo en las zonas más secas de los valles donde hayedos y robledales no crecen debido a su mayor dependencia hídrica, en las laderas de Peña Sagra, (Valderrodíes, Aniezo y Bárago), constituyéndose en la especie dominante en los valles del sur (Valdeolea, Valdeprado del Río y Valderredible). También hay melojos en Liencres y cabo Guintres.